Wafi Salih

Honor al fuego

 

El dragón de humo escapando del monte Fuji

 


Junto al cardo 
ilumina el cocuyo 
a una rosa



Sombra del día
¿Quién te despliega 
hace la noche?



Torpe mi gato
detrás de las mariposas 
pisando flores



Basta un elefante 
para aplastar un reino 
de hormigas



Dobla el bambú
cuando lo acaricia el viento 
su dura espalda



Lleno de pulgas 
mi perro ha vuelto 
feliz del campo



Extasiadas
las flores ante el espejo 
del tocador



Míralo bien
el sauce del patio 
es un espejo



Una manada
de hipopótamos, abrió un canal 
del pantano al río



Quitó el polvo
una huidiza lagartija 
en mi librero



Vía Láctea
danza sobre el poema 
una mariposa



Nace un mirlo
en el follaje de estas letras 
sobre el papel



Libro de poemas
en el mercado de flores 
maceta de palabras



Tanta belleza
sólo un débil reflejo 
atrapa el verso



En la neblina
mi escoba invisible 
barre a tientas



Lección de Zen
sigo el rastro invisible
de un caracol



Muere el grillo
la orquesta del patio 
desafina



¿Dónde ahora
la caja de resonancia 
del grillo muerto?



¡Cuántas moscas
sobre el ruiseñor que ayer 
cantó a la flor!



Sobre mi tumba 
florecerá la noche
¿Quién lo sabe?



Cuando yo muera
harán mis cansados huesos
honor al fuego



Suspira el viejo 
cerrando la puerta 
al rudo invierno



Semeja un viejo 
corvada en el estanque: 
luna menguada



Para sus trenzas 
las niñas coquetas 
rondan las flores



La loca del pueblo 
va contando estrellas 
mientras camina



Granos de arroz
el mendigo los mira 
perlas pequeñas



Sombra chinesca
el reflejo de los amantes 
en la pared



Ancianos, ella él
siguen elevando cometas 
sin mirarse



Amor de otoño 
entrelazan sus manos 
para el invierno



Huella en la nieve 
como fila de ángeles 
blanca tan blanca



Suspira por ti
esta lluvia que cae 
menuda, lenta



Amado mío 
miro en el espejo 
tu rostro en mi



Toc, toc, mi corazón
el paraíso de tus manos 
tras una puerta



Sobre el tejado
¿a la desnudez de la luna 
ronronea el gato?



Llena de noche
la chicharra canta 
ajena a todo



Bosteza el gato
la noche en su cuerpo 
se despereza



Noche tras noche
un gatito sobre mis sábanas 
tibia mis pies



Busca su rostro 
en el sol naciente 
el girasol



¡Un poema!
la luz desposada 
con el cerezo



Por mi ventana
los lirios del comedor 
ven la tormenta



En el invierno 
junto a la chimenea 
un lirio seco



Estoy olvidando
por las rosas del delantal 
mi traje de seda



Ratón sin casa
en la iglesia del pueblo 
duerme la siesta



Templo desierto 
oigo a los mosquitos 
multiplicarse



¡Qué gran pueblo! 
casuchas desvencijadas 
rodean un templo



Casa en ruinas 
una mujer espera 
señales del cielo



Niña descalza
por un mendrugo de pan 
llega a la iglesia



Blancos suspiros 
cuando miro las garzas 
cruzar el cielo



En mi epitafio
escribe esto: sólo busco 
mirar el cielo



Escribe el cielo 
una carta de amor 
cada mañana



¡Qué grandeza!
también en el vientre de la ostra
el rostro de Dios



Vienen a mi
pequeña rana que salta 
los días idos



Aguas termales
mira el búho desde una rama 
mi desnudez



Llena de hollín
una hormiga en mi cara 
traza un mapa



Cansada de vivir 
una mosca suicida 
en mi taza de té



La Vía láctea 
en mi taza de té 
cada mañana



Croan las ranas 
notas de mi tristeza
en su garganta



Puente colgante 
deja pasar también 
a mi tristeza



Mi frágil alma
ante un plato de lentejas 
medita el alba



Mitiga algo
el almíbar del níspero 
en mi boca



Blanco, tan blanco 
como un plato de arroz 
mi pensamiento



¿Quién comerá
los dátiles que plantó 
mi abuelo?



Días de junio 
titilan los mangos 
en mis pupilas



¡Que coincidencia!
Las vetas de estas piedras 
sobre mis manos



Rudo invierno 
tiene prisa mi alma 
por desnudarse



Soy los latidos
en las cartas de amor 
de mis abuelas



Sin ufanarme
soy un simple cuco 
canto la vida



Limpio mis santos
algo de mí en sus túnicas 
descoloridas



Yo Wafi Salih
un haiku con espinas 
sobre el mundo



Los pájaros 
poemas de Basho 
en el ciruelo



Maestro Issa
este tachón con ira
¿será un haiku?



Sólo a veces 
retoña, sólo a veces 
la flor pisada



Atardece
qué libro distrae 
al amante solo



El absoluto
dedos rozando el pétalo 
de una flor



Junto al arroyo
la fogata encendida 
cuece las horas



Me desvelo
en las blancas paredes 
sombras dormidas



Un imperio de luz 
esas flores silvestres 
sobre tu pelo



¡Ahora entiendo! 
es un largo suspiro 
la primavera



Gotas de rocío 
perfectas, tan perfectas 
como un mantra



Nada esperan
las flores que lentamente 
arrastra el río



Suntuoso tulipán 
floreces al mismo tiempo 
que las zanahorias



Deshilachada
la cortina, en tiras 
muestra la luna



¿Cuántas veces 
tengo que ver morir 
la primavera?



¡Qué nostalgia!
una manada de cebras 
los suspiros



¡Como gime!
Cuando cierro la puerta 
al duro invierno



Mientras llueve
el repique de gotas 
traduce el loro



Viene la noche 
diminuta cerbatana
espera un poco



Traje de bodas
trazó un insecto sobre él 
manchas de luna



Sin prisa ardilla 
todos los caminos 
llevan al cielo



Riñes el tiempo 
ahogando el rosal 
terca vecina



Estas moras son 
piedras preciosas 
engarzadas al verso

 

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