Inma Solí­s

Poemas en abanicos

 

Gustav Klimt: Mujer con abanico

 


 

TEJER DE OTOÑO

Hay dí­as que es amor lo que ha tejido el alma.
Hay otros que ha enredado con el paso del tiempo.
Hoy su hilo ha tejido con risa de tus ojos.

SER SIN TIEMPO

Solo ser árbol
sin lunes.
Volar amaneceres
sin las ocho.
Croar en los estanques
sin septiembres.
SOLO SER.
SOLO ESTAR.
Sin el tiempo inventado
de los hombres.

TENGO

Tengo la mirada llena de tus miradas.
Mis mañanas acostumbradas a tu querencia.
Mis entrañas cálidas del sabor de tus besos
TENGO.

BREVES PERO INTENSOS

Aprendemos del tiempo de los otros;
otra vez hay risas
donde murió la madre.

*

Dieciséis cubiertos para comer sola:
o sobran cubiertos
o sobra soledad.

*

Hoy, a pesar del frí­o,
ya huele a primavera.
Hoy, a pesar del tiempo,
me sigue oliendo a ti.

*

Pon tu boca en mi boca,
apoya tu nariz sobre la mí­a
y, sobre todo, AMOR,
sueña conmigo.

TRUCOS DE CONVIVENCIA

Acertar la medida de
los cuerpos y el alma.
Averiguar la talla en
los dí­as difí­ciles.
Adivinar el ancho de
una tristeza oculta.
Alquimiar para siempre
la rutina que aplasta.

PERIPLO INTERIOR

Cambio
paisajes
por horas de tus ojos.
Destinos
por poros de tu cuerpo.
Sueños
por tu risa del dí­a.
Habrá muchos mundos por descubrir
pero me llevará toda la vida
habitarte.


 

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